Si sospechas que tienes chinches en casa, hay varias señales y evidencias que puedes buscar:
1. Picaduras en la piel
Aparecen en grupos o en línea recta.
Son rojas, inflamadas y pueden causar picazón intensa.
Suelen estar en brazos, piernas, cuello y espalda.
2. Manchas de sangre en las sábanas
Pequeñas manchas rojizas en las sábanas, almohadas o colchón pueden ser restos de chinches aplastadas.
3. Excrementos de chinches
Puntitos negros o marrones en colchones, sábanas, paredes o muebles.
Suelen parecer motas de suciedad o polvo oscuro.
4. Cáscaras o pieles mudadas
Las chinches mudan su piel a medida que crecen, dejando exoesqueletos traslúcidos en el colchón, alfombras o grietas.
5. Mal olor
Un olor dulce y desagradable, parecido al del moho o a una toalla húmeda, puede indicar una infestación.
6. Presencia de chinches vivas
Busca en costuras del colchón, esquinas de la cama, muebles, zócalos y enchufes.
Son de color marrón, ovaladas y miden entre 4 y 7 mm.
Si notas varias de estas señales, es probable que tengas una infestación. En ese caso, lo mejor es actuar rápido con limpieza profunda y, si es grave, contactar a un profesional de control de plagas.